- ¿Dale que estábamos perdidas por el bosque y que venía un oso y nos quería comer?
- No.
- ¿Y que después con este palo, nosotras le aplastábamos la cabeza y resulta que el oso era bueno y nos invitaba a su casa?
- No.
- ¿Y dale que entonces festejábamos el cumpleaños con todos los osos y nos metíamos en una cueva en la que había todo tipo de exquisiteces?
- No. Basta.
- ¡Pero de las que te gustan a vos!. Porque dale que los osos eran cheff y sabían hacer creme brulee?, ¿dale?
- No. No quiero. Salí.
- ¿Dale que este sillón era una cueva? Mirá si lo damos vuelta. Uahuuuuuuuu!!! ¡Mirá que buena cueva que tengo! ¡Yo tengo una cueva y vos no tenés nada!. ¡Vos no tenés nada!
- Dejá de hacerme burla. Basta.
- Bueno, entonces dale que como vos no querías estar en el cumpleaños, nos matabas a todos y te quedabas con la creme brulee?
- No. Dije que no.
- Entonces te voy a matar con esta pistola que es recontra grande y que tiene una bala que desde donde tires, va directo al corazón. …perá…perá que ya te la tiro…perá que me meto adentro de la cueva…..perá, perá….no te vayas….no te vayas!!!,,,,
¡Ufa! Se fue.
Es una aburrida.
Siempre queriendo hablar del trabajo.Como si no pasáramos suficiente tiempo en la oficina.
Y de los hijos que ya no nos dan bola y tendrían que estar laburando.
Y del marido que no la entiende.
Y de los amigos del marido, que son unos hincha pelotas que siempre lo llaman para ir a la cancha.
Y de lo cara que está la ropa.
Y de que después nos van a doler todos los huesos.
Y de que después nos van a doler todos los huesos.
Ya está. No la invito más a jugar a mi casa.
Ja...ja!!! Genial!!!! son muy buenos tus acopios, lectura diaria obligada para empezar el día contagiada de tu frescura
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